Sin lugar a dudas la danza se parece cada vez menos a lo que su palabra significa. Desaparece en sus formas conocidas emergiendo en nuevas y renovadas situaciones artísticas de la mano de otras artes, de la tecnología, de nuevas experiencias y vivencias.
Particularmente, la danza contemporánea de la ciudad de Buenos Aires atraviesa un importante momento: tenemos producciones de excelente calidad, diversidad, muy variadas propuestas, pensamientos y novedad.
Cuando fuimos convocadas para la curaduría y dirección artística del Buenos Aires Danza Contemporánea 2008 -V Festival-, decidimos llevar adelante este inmenso compromiso con el objetivo de desarrollar una programación que nos ayude a encontrar respuestas y amplíe los horizontes hacia nuevos contenidos.
Por eso, además de mostrar las obras que realizan los artistas de la danza, proponemos espacios para mirar, improvisar, pensar y escuchar la danza desde ópticas diferentes. Ópticas que acompañen el cambio del que estamos siendo protagonistas: cambio de siglo, de paradigmas. Queremos que el Buenos Aires Danza 2008 sea un festival contemporáneo a todos.
Nos proponemos acercar la danza al público, no sólo a aquel fiel, entendido, sino también apuntar a gente que tal vez vea danza por primera vez y poder mostrarle el talento y la creatividad de nuestros coreógrafos y bailarines.
Creamos asimismo una sección que esperamos se mantenga en el tiempo: “El Homenaje”.
La intención es recordar y valorar el trabajo de artistas maravillosos, gente valiosa que construyó la historia de la danza de esta ciudad y nuestra primera homenajeada es Iris Scaccheri. Su obra, su genialidad, su historia y su legado.
Las tres recordamos que fue ella uno de los motivos por los que empezamos a bailar: la vimos bailar en la calle, en el Teatro General San Martín y hasta en la mesa de Mirtha Legrand. Una bailarina creadora, valiente e indescriptible.
Decidimos además asumir riesgos, proponer espacios de prueba y error, de experimentos, de desafíos. Espacios que esperamos sean estimulantes y vitales. Y en este punto agradecemos a todos los artistas que se entusiasmaron, trabajaron y se arriesgaron a probar nuevas instancias de danza.
Hay películas, charlas sobre gestión y transformación social, invitaciones a instituciones y actividades con disciplinas cercanas a la danza que forman parte del entrenamiento de los bailarines.